Si estás pensando en independizarte es posible que una de tus principales dudas sea sobre decidir entre vivir solo o compartir piso con alguien. Muchos  de los que apuestan por irse de casa en compañía deciden independizarse con la pareja; en cambio, los hay que no están preparados para dar ese paso y prefieren compartir piso con amigos. También existen casos en los que por necesidades laborales o de estudios necesitan compartir piso con desconocidos ya que económicamente no puedes mantener una independencia en solitario. Sea cuál sea tu caso, es importante que conozcas los beneficios e inconvenientes de compartir piso.

Ventajas de compartir piso

Si vivir solo tiene ventajas y desventajas, los pisos compartidos no podían ser menos. La opcíon de independizarse con alguien destaca por el motivo económico. Sin embargo,  más allá del ahorro de dinero, existen beneficios de compartir pisos muy variados:

• Compartir gastos: ya hemos comentado que compartir los gastos de vivir solo es una de las principales ventajas de vivir con alguien, ya que de esta manera no sólo reducimos las cantidades de los pagos sino que además nos permite ahorrar algo de dinero mes a mes.

• Ahorrar tiempo: las tareas del hogar también se comparten. El tiempo individual dedicado a la limpieza y la organización se reduce y se optimiza.

• Aprender a convivir y conocer gente nueva: deberás ampliar los límites de tolerancia y comprensión, ya que no siempre las personas con las que compartas piso serán como tú o ni siquiera parecidas. Aprenderás nuevas experiencias, ideologías y estilos de vida.

• Evitar la soledad: cambiar de vivienda, sobre todo si además implica un cambio de ciudad, puede ser muy duro. Por eso, contar con alguien en una situación parecida a la tuya o que tenga experiencia en esta situación puede ayudar a sobrellevar mejor la situación.

Desventajas de compartir piso

Al igual que puedes disfrutar de los aspectos positivos, también deberás estar preparado para afrontar los aspectos negativos de independizarte con alguien. La convivencia siempre es complicada por lo que es posible que debas lidiar con alguno de estos inconvenientes al compartir piso:

• Riesgo de impagos: algunos compañeros de piso pueden ser problemáticos a la hora de pagar el alquiler, bien porque no saben administrarse o bien porque no quieren.

• Mayores conflictos: compartir las tareas del hogar incluye una parte de compromiso por parte de todos los habitantes que no siempre puede ser respetado y cumplido por todos.

• Problemas de convivencia: desde el uso de las zonas comunes hasta la comida pueden dar lugar a discusiones entrte los compañeros de piso: gente que monopoliza el baño, comida que desaparece de la nevera...

• Pérdida de intimidad: por un lado, hay algunos compañeros o compañeras que no avisan de las visitas y por otro lado, si te apetece desconectar del mundo deberás recluirte en tu habitación.